Consejos prácticos para ahorrar agua en el baño

No es lo mismo abrir un grifo convencional que un grifo con limitador de caudal. La diferencia, de hecho, se puede cuantificar en litros de agua. Se trata de reductores de caudal que aseguran un consumo máximo (5 litros por minuto, por ejemplo), independientemente de si la maneta está completamente abierta o no. Un recurso muy útil tanto en el lavabo como en la ducha o la bañera.

Por su parte, el sistema de apertura en dos pasos, que incorporan griferías como Balance, permite ahorrar el 50% de agua cada vez que se abre el grifo. Se trata de una grifería con dos posiciones que, al abrir la maneta, ofrece una leve resistencia en la primera posición. Ese es el punto en el que solamente saldrá la mitad del caudal, pero, créenos, es suficiente para las acciones más cotidianas, como lavarse las manos o los dientes. Y si en algún momento necesitas un caudal de agua más abundante, solo hay que abrir del todo la maneta.

No dejar correr el agua de más es una de las claves para reducir su consumo. Por eso es muy buena idea incorporar al baño una grifería electrónica. Se activa por un sensor y solamente funciona mientras detecta el movimiento de la mano delante, ¡así es imposible olvidarse el grifo abierto!

Otra posibilidad, muy útil sobre todo para el ahorro de agua en espacios públicos, es contar con griferías temporizadas, que se accionan mediante un pulsador superior y solamente echan agua por un periodo determinado, por lo que es realmente fácil controlar el consumo. Además, la grifería temporizada de Gala incorpora limitador de caudal.

En una ducha se gasta mucha menos agua que llenando la bañera. Eso sí, no te pases con el tiempo de la ducha, pues se estima que el consumo de agua en una ducha de 15 minutos es de 150 litros.

Un buen truco para consumir solo el agua imprescindible para la ducha es contar con una grifería termostática como las que encontrarás en el catálogo de Gala. Estos dispositivos mantienen el agua a una temperatura constante y cuando abres el grifo ya sale a esa temperatura. Imagínate los litros de agua que podrás ahorrar gracias a una ducha termostática con respecto al tiempo que dedicas a esperar cada día a que el agua salga tan calentita como te gusta.

¿Has pensado alguna vez cuánta agua se pierde cada vez que se tira de la cisterna? Son muchos litros. Por eso es tan importante contar con un sistema de doble pulsador en el inodoro. Estos sistemas permiten elegir entre el vaciado parcial del tanque o el vaciado total, porque no siempre necesitamos la descarga completa. Fíjate si supone un ahorro en el consumo de agua del hogar que hay estimaciones que apuntan a que el doble pulsador reduce el consumo por persona y año en 43.000 litros de agua, un 40% menos que en aquellos inodoros en los que no existe esta posibilidad.